Piscinas saladas, mucho más que una moda

Las piscinas saladas son una excelente alternativa ante las piscinas de cloro tradicional. Aunque no agregas tabletas de cloro a una piscina de agua salada, todavía contiene cloro, solo que contiene una cantidad menor que es generada por un sistema de filtrado.

¿Qué son las piscinas saladas?

Las piscinas saladas son piscinas convencionales, que en lugar de usar agua dulce utilizan agua salada. En este tipo de piscinas deja de usarse el cloro químico directamente en el agua, ya que utilizan un sistema de cloración salina que lo sustituye.

La cloración salina es realizada por equipos electrónicos llamados cloradores salinos, que se conectan al sistema de llenado y filtración de la piscina. Sin embargo, se debe  añadir sal de piscina al clorador salino, que se encarga de hacer circular el agua salada a través de dos placas cargadas eléctricamente y la transforma en cloro.

Por lo tanto, el agua de la piscina se desinfecta siempre con cloro, pero el proceso es diferente al de una piscina de cloro tradicional.

¿Cómo funcionan las piscinas de agua salada?

El funcionamiento de las piscinas con sal es sencillo. Consiste en agregar un generador de hipoclorito sódico y cloro natural llamado clorador salino, al sistema de filtrado tradicional.

Mediante un proceso de electrólisis salina el clorador separa el cloro del sodio que compone la sal. Esto permite que el cloro natural desinfecte el agua al mezclarse con ella. Dicho proceso de desinfección tarda algunas horas, mientras el cloro mantiene su estado; ya que luego sus moléculas se juntan y vuelve a convertirse en sal.

Es evidente que la sal no se consume, por lo que no es necesario reponerla. Por el contrario, es reutilizada en el repetido proceso de desinfección. Sin embargo, al disminuir la cantidad de sal, los cloradores salinos de forma automática envían un aviso para su reposición.

¿Cuáles son los beneficios de las piscinas saladas?

Una piscina con sal destaca en muchos aspectos en comparación con una piscina desinfectada con cloro. A continuación mencionaremos algunas de las ventajas de las piscinas que utilizan cloradores salinos:

• Se reduce el consumo de productos químicos para el mantenimiento de la piscina.
• Minimizan el impacto negativo en la piel, la vista y la salud general de quienes la usan, especialmente las personas alérgicas, los niños y los ancianos.
• Poseen un efecto antiséptico beneficioso, por la sal que contienen, en la piel y las membranas mucosas.
• La falta de olor a cloro hace que el baño sea más agradable.
• Tienen una desinfección permanente y uniforme gracias al dispositivo de electrólisis.
• Son menores los costes de mantenimiento de la piscina.
• Se reduce el riesgo de accidentes por manipulación de sustancias químicas para el mantenimiento.

¿Cómo es el mantenimiento de una piscina salada?

El mantenimiento de las piscinas saladas es sencillo. Al igual que en una piscina convencional debe hacerse el proceso de limpieza de los restos y suciedad dos veces por semana. Para ello se recomienda el uso de una aspiradora de mano acondicionada para tal fin o un succionador automático.

También es importante limpiar el clorador salino trimestralmente para eliminar la sal acumulada en la celda. Además, es aconsejable hacer esta limpieza con utensilios plásticos para raspar la sal o con una manguera de presión.

Por otro lado, es necesario controlar el nivel de cloro y medir el pH del agua para verificar un óptimo estado de la misma. Dicho proceso de medición puede hacerse de forma manual o se puede instalar un regulador de pH, en caso de que el clorador salino no tenga incluido el sistema que controla de manera automática estos valores.

¿Qué inconvenientes tienen las piscinas saladas?

Algunos de los inconvenientes de una piscina con sal son:

• No eliminan por completo la necesidad de usar productos químicos para piscinas después de un largo período de inactividad de la piscina, pero la reduce de forma significativa.
• Para que la electrólisis del agua funcione correctamente, es necesario mantener una concentración adecuada de iones de hidrógeno (pH). Idealmente, el pH debería estar entre 6,8 y 7,2.
• Todos los elementos de la tecnología deben ser adecuados para el agua salada.
• Su consumo eléctrico es un poco alto.
• El sistema no es compatible con tuberías de cobre.

¿El sistema de cloración salina es recomendable para cualquier piscina?

Sí, el sistema de cloración salina es recomendable para cualquier piscina, sin importar su tamaño o ubicación; ya que con la sustitución del cloro por la sal, la calidad del agua aumenta.

La instalación de estos cloradores salinos es bastante sencilla, ya que estos equipos se adaptan a todo tipo de piscinas. Únicamente se deben acondicionar las tuberías por donde es introducida el agua a la piscina e instalar el sistema de cloración salina.

Piscinas saladas, la mejor alternativa

Los diversos beneficios que se obtienen al instalar y disfrutar las piscinas saladas justifican en gran medida la inversión inicial de la instalación del sistema de cloración salina. El agua salada para piscinas en su estado óptimo contribuye a mantener y mejorar la salud de quienes la disfrutan.

Incluso, las piscinas saladas por ser ecológicas contribuyen a conservar y mantener el medio ambiente, así como reducir los gastos de mantenimiento. Por este motivo, las piscinas saladas más que una moda son una excelente inversión.