Disfrutar de un refrescante día de piscina es algo que nos gusta a todos sin lugar a dudas. Por desgracia, en las piscinas siempre hay algo más que solo agua. Y más aún si se trata de una piscina pública. Ten en cuenta que en la piscina puedes encontrar gérmenes y bacterias que se adhieren a tu piel. Si no tienes cuidado, estos pueden enfermarte y acabar con la diversión. Por esta razón, ¡ducharse al salir de la piscina es una regla que nunca debes romper!

¿Por qué es importante ducharse al salir de la piscina?

Son muchas las razones por las que las personas deben ducharse al salir de la piscina.

La primera y más obvia es que reduce el riesgo de enfermar. Ducharse es la forma más efectiva de limpiar el cloro y algunos gérmenes y/o bacterias que se adhieren a tu piel cuando estás en el agua.

Si no te duchas, estarás expuesto a las reacciones del cloro en tu piel y en tu pelo. Algo que además de ser incómodo por el olor, puede resultar peligroso para tu salud. Pero veamos a continuación algunas de las principales razones de por qué todas las personas deben ducharse al salir de la piscina:

1.- Si no te duchas, corres el riesgo de enfermar

Como ya lo hemos dicho anteriormente, ducharse al salir de la piscina es una cuestión de higiene y salud. Puede que no lo pienses, pero hay muchas cosas que pueden ir mal cuando sales de la piscina. Los que no se duchan corren el riesgo de enfermar por las bacterias existentes en el agua de las piscinas que no reciben un mantenimiento adecuado.

Por otro lado, el cloro que a menudo se utiliza para desinfectar y mantener la higiene en la piscina puede quemar las membranas mucosas, los ojos y la piel si se encuentra en niveles elevados. Algo que suele suceder mayormente en las piscinas públicas.

2.- Podrías estar esparciendo productos químicos o gérmenes en tu cuerpo sin saberlo

Otra de las razones para ducharse al salir de la piscina es que, al salir del agua, podrías estar esparciendo productos químicos o gérmenes en tu cuerpo sin saberlo.

Esto, sin duda, es un problema porque además de afectar tu salud, puedes afectar la salud de las personas a tu alrededor. Especialmente la de aquellos que tienen un sistema inmunológico débil.

Por si no lo sabes, el cloro es un producto químico muy fuerte, con diferentes niveles de exposición que pueden ocurrir:

  • Al contacto directo con el agua, como en el caso de la natación.
  • Por contacto indirecto, que sucede cuando alguien lo tiene en el pelo o la piel.
  • Exposición repetida a pequeñas cantidades de cloro a lo largo del tiempo (llevar ropa lavada con agua del grifo clorada).

3.- Ducharse al salir de la piscina puede evitarte afecciones en la piel

No se pueden menospreciar los posibles daños del cloro en la piel y/o el cabello. Ducharse al salir de la piscina puede resultar la primera línea de defensa contra las infecciones que podemos adquirir en el agua.

Recuerda que estamos hablando de un sitio donde entran todo tipo de personas. Por tanto, se pueden desarrollar diferentes tipos de enfermedades cutáneas que se pueden adquirir como consecuencia del cloro o por contagio.

4.- Ducharse antes y después de nadar puede disminuir el riesgo de desarrollar una infección urinaria

Siempre se debe tomar una ducha en la piscina antes de entrar y al salir del agua. Recuerda que cuando te bañas en una piscina pública, estás expuesto a mucha gente.

Aunque el cloro del agua mata la mayoría, no los elimina todos. Ducharse antes y después de nadar puede ayudar a prevenir la propagación de las bacterias que causan las infecciones del tracto urinario (ITU).

Si no te duchas después de nadar, todos estos gérmenes no deseados permanecerán en tu piel o en tu pelo hasta que encuentren otro lugar donde vivir. Lo recomendable es ducharse al entrar en la piscina y al salir de ella.

No olvides que al entrar al agua estarás en contacto con infinidad de gérmenes y bacterias provenientes de la orina y otras emisiones o fluidos del cuerpo humano de otras personas.

5.- Son las reglas

Tanto si frecuentas piscinas públicas como si no, debes saber que una de las reglas comunes en todas es que es obligatorio ducharse en la piscina.

Aunque suene irónico, debes estar limpio antes de entrar al agua y debes ducharte al salir de la piscina para limpiar tu cuerpo del cloro, los gérmenes y las bacterias.

En muchos casos, el mantenimiento de las piscinas puede resultar deficiente o inadecuado. Y la única opción posible e inmediata para evitar la propagación y contagio de infecciones y/o enfermedades, puede ser una ducha en la piscina.

Ducharse al salir de la piscina es más importante de lo que crees

Sin duda, ha quedado muy claro que ducharse después de nadar es muy importante. Si no te duchas, hay muchas cosas que pueden salir mal. Resulta que ducharse al salir de la piscina, no solo te hace sentir más limpio, sino que también reduce las posibilidades de enfermar por contraer una infección mientras estás en el agua.

Opta por la cloración salina para tu piscina

A lo largo del artículo hemos hablado de la importancia de ducharse al salir de la piscina pública, principalmente. Sin embargo, cabe resaltar que es esencial hacerlo tanto en las privadas como en las piscinas de comunidades de vecinos. También hemos mencionado algunos de los principales riesgos del cloro, pero no de los beneficios de optar por el sistema de cloración salina, del cual somos expertos en Cool Pool. Si necesitas asesoramiento sobre ello, ¡no dudes en consultarnos!