Disfrutar de una piscina implica que esta sea un espacio higiénico. Para ello es indispensable combinar un buen sistema de filtrado con un excelente tratamiento del agua. En tal sentido uno de las mejores opciones para tratar el agua es depurar la piscina con sal.
Esta técnica ofrece desinfección automática y constante de la piscina a bajo coste. Además, respeta el medioambiente, lo que es beneficioso para todos.
La técnica para depurar la piscina con sal
La técnica de depurar la piscina con sal o electrólisis salina es un proceso de desinfección natural, que consiste en generar cloro puro a partir de una baja concentración de sal en el agua, la cual sufre un proceso de electrólisis para liberar el cloro natural contenido en el cloruro de sodio.
Este innovador sistema de depuración del agua de la piscina, se creó con el fin de beneficiar a las personas alérgicas o sensibles al cloro y se fundamenta en el ecosistema natural del mar. Por lo que, además, es una alternativa que respeta el medioambiente.
Además, la piscina salada ofrece los beneficios de la sal, la piel se vuelve suave, firme y con mejor riego sanguíneo, y el aire ligeramente salado limpia las vías respiratorias. Por tanto, este sistema de purificación no solo te ofrece agua limpia y segura, también aporta el efecto curativo de la sal.
Ventajas de esta técnica
La electrolisis salina es una estupenda técnica de purificación para el agua de la piscina, que te ofrece ventajas significativas a corto y largo plazo:
- Es un proceso de saneamiento natural del agua.
- Respeta el medioambiente.
- Elimina el riesgo de piel seca, irritación de los ojos, alergias, olores desagradables o ropa de baño descolorida, como ocurre con el cloro comercial.
- Es un sistema automatizado y cíclico, que requiere de mínima supervisión. Con agregar sal una vez instalado el sistema y vigilar el pH de la piscina será suficiente.
- No requiere de productos químicos, por lo que evita el riesgo de su manipulación por almacenamiento y dosificación.
- Reduce los costes de mantenimiento, puesto que el cloro se libera por la electrólisis salina y no se requiere de productos químicos comerciales.
- La inversión inicial en el sistema de cloración salina se recupera en un tiempo de dos o tres años.
- Es un sistema de fácil instalación, compatible con todas las piscinas, incluso con las ya existentes.
El proceso para depurar la piscina con sal
La depuración por cloración salina en la piscina consiste en un sistema que requiere de un electroclorador o esterilizador de cloruro de sodio y sal. Aunque la sal en sí misma no es desinfectante, se usa porque el cloro inactivo contenido en ella se libera mediante la electrólisis del cloruro de sodio.
Este proceso de depuración se realiza al pasar el agua salada por el esterilizador, donde los iones del cloruro de sodio presentes en ella, se trasforman en cloro gaseoso. Este es un potente desinfectante natural, que se disuelve de inmediato en el agua de la piscina, purificándola de manera muy eficiente y natural. Este cloro liberado de la sal es distribuido a toda el agua de la piscina mediante las boquillas de retorno.
Posteriormente, ante la exposición del agua a los rayos UV, el cloro vuelve a convertirse en sal. Así da paso a un proceso cíclico de depuración de la piscina de sal, por lo que no es necesario agregar más sal, ya que esta se conserva casi en su totalidad.
Consejos prácticos para una depuración óptima
Como ya se ha dicho, depurar la piscina con sal solo requiere de la electrólisis del cloruro de sodio en el agua. Basta con agregar la sal, en la cantidad justa, después de la instalación del sistema para que el agua sea saneada de manera cíclica y automática. Sin embargo, es importante tener en cuenta los siguientes y útiles consejos:
- Supervisa el sistema de purificación de la piscina de forma periódica, aunque no es necesario hacerlo con tanta frecuencia como con el cloro comercial.
- Controla la cantidad de sal en el agua de la piscina si esta se somete a grandes o frecuentes cantidades de lluvia. Asimismo, si por alguna razón se elimina una buena cantidad de agua. En ambos casos, será necesario ajustar la cantidad de sal, ya que el agua de la piscina debe contener la sal necesaria para un óptimo saneamiento.
- Examina de forma regular el pH del agua, el cual debe ser neutro. Para tal efecto es recomendable la instalación de un regulador automático de pH. Asimismo, es importante que el nivel de pH en la piscina de agua salada oscile entre 7,2 y 7,4.
- Reemplaza los electrodos que liberan en cloro en el proceso de electrólisis, como máximo cada 12.000 horas (5 a 7 años) de funcionamiento, puesto que tienen tiempo determinado de vida útil.
Apuesta por la cloración salina
Es evidente que una piscina de agua salada es un lugar muy agradable y seguro, que no solo te divierte, sino que también contribuye con tu salud, debido a que el agua es purificada con cloro natural liberado de la sal y enriquecida con los beneficios del cloruro de sodio.
Ahora que conoces todo los beneficios de depurar la piscina con sal, ¿a qué esperas para apostar por la cloración salina? En nuestro blog podrás encontrar mucha más información que te será de gran utilidad.